Una pareja con muchas diferencias pero que suele funcionar bien si ambos se esfuerzan un poco.
Desde las primeras miradas, el sensible y discreto Piscis quedará prendado por esta mujer tan apasionada y explosiva. No se resistirá por mucho tiempo a los ataques de seducción de la Aries, que está decidida, llena de energía y dispuesta a todo para seducirlo.
A la Aries también le encanta este hombre tan diferente a ella, tan encantador. Su forma de ser y los pequeños gestos de Piscis le hacen perder la cabeza. Sus diferencias estimulan su deseo y abren la puerta a momentos llenos de romanticismo y ternura.
Él siempre sabe encontrar las palabras perfectas, sabe hacerla soñar y llevarla a su mundo.
En contacto con él, Aries consigue alejar su mente de las preocupaciones y problemas de la vida cotidiana, lo que le hace ganar tranquilidad y le permite enfocar y vivir la vida de una manera diferente.
Por su parte, el hombre Piscis encuentra en la mujer Aries la energía necesaria para realizar proyectos y planes que antes ni hubiera imaginado hacer. Ella es una persona activa que lucha por lo que quiere, que mira siempre hacia adelante y le transmite esto mismo a su pareja.
El hombre Piscis es de esas personas que necesita saber que tiene apoyo de otras personas para hacer algo. En contacto con la Aries, se atreve con cosas que antes eran impensables.
No obstante, no todo es tan fácil como parece entre estos dos signos. Para que esta pareja pueda perdurar en el tiempo, la Aries deberá empezar por aceptar una vida un poco más tranquila y centrada de lo que está acostumbrada. No es que viva una vida muy alocada, sino que le gusta hacer cosas, sentirse viva. El Piscis deberá también poner de su parte y aprender a retenerla, a hacer que entre en su mundo de una forma sutil, sin que ella se dé cuenta. Si consigue que poco a poco empiece a ver las ventajas de una vida un poco más estable y tranquila, la pareja habrá solventado su principal riesgo.
El Piscis también deberá hacer un esfuerzo para intentar salir de su aburrida vida y aceptar que en una relación hay que satisfacer los deseos de ambos miembros de la pareja porque puede que llegue un día en el que la Aries se replantee la relación por la poca iniciativa y determinación que él tiene, llegándose a cansar de tener que decidir todo en la pareja.
Otro problema que suele surgir entre ellos tiene que ver con la timidez que sufre Piscis, algo que puede ser un foco de conflictos, ya que la comunicación es importante en una relación y evita muchos problemas y malentendidos. Si quieren evitar llegar a situaciones que desgasten la relación, él deberá poner de su parte para intentar ser un poco menos reservado con su pareja, tratando los problemas cuando llegan y no dejando que se hagan más grandes.
En definitiva, la pareja deberá tratar de encontrar puntos en común sobre el cual podrá evolucionar la relación y así evitar los conflictos y tensiones que pongan en peligro esta bonita historia de amor.
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