Debemos ser conscientes, en primer lugar, de que el oso es un símbolo con muchas contradicciones. Por un lado, podemos observar una imagen de un oso en un estado de tranquilidad y, por otro lado, como símbolo de poder y como un guerrero.
Hay otras contradicciones cuando observamos a los osos en la naturaleza. Aunque es omnívoro (come carne y hierbas), el oso prefiere una dieta basada en cosas dulces como pueden ser las bayas. Podemos observar al oso como un animal amistoso, meloso, con una energía llevadera, etc. todo ello cuando las condiciones son favorables.
Algunos de los símbolos que se asocian a este animal son: valentía, paz, resurrección, poder, benevolencia, maternidad y dualidad.
Algunos de los conceptos que se asocian al oso son muy profundos y con un gran significado y pueden sernos útiles en nuestro camino vital. Algunos de los campos en los que debemos tener presente a este animal son:
En el campo de la paciencia y la conexión. La idea de hibernar con nuestras ideas o proyectos hasta que un mejor tiempo se presente. Además, el oso nos anima a conectar con dos elementos, las fuerzas de la tierra y las del mundo espiritual.
En cuanto a la seguridad y la autoridad, podemos darnos cuenta de que nadie cuestiona la presencia de un oso, de que la autoridad es algo implícito, algo que forma parte de su ser y esto es una lección muy valiosa que podemos tomar de este animal.
La crianza y la protección son otros dos valores a tomar en cuenta y están relacionados con las madres oso. La clave es que en su crianza, las madres oso les dejan a sus hijos experimentar e investigar para que sean ellos los que aprendan por ellos mismos.
El oso es símbolo de maternidad y de protección al menor. Sin embargo, otro significado que toma fuerza es el del oso visto como un animal dominante y cuando su espacio se altera, siempre está totalmente preparado para defenderse. En este clima, en el que el oso no está tan tranquilo, podemos observar otros significados diferentes a los vistos hasta ahora y que van en la línea del coraje y el tema de los guerreros.
Como se dijo anteriormente, el oso también se asocia con la luna y con los movimientos de la noche, de hecho se dice que vive de acuerdo con los ciclos de la luna (desde una perspectiva india). De hecho, se llegó a relacionar esta conexión de la luna y el oso, por los patrones de hibernación de este animal.
Algunos de los simbolismos que tienen que ver con la hibernación del oso son: el Yin (haciendo referencia al Yin y el Yang), la luna, el invierno, la feminidad, la oscuridad, la introspección y el subconsciente. De modo contrario, el despertar del oso se relaciona con: el Yang, el sol, la acción, la masculinidad, la primavera y el verano, la luz, la extroversión y la consciencia.
De esta forma podemos ver que existen dos caras en cuanto al simbolismo de este animal. Otro tema que se le asocia y que se nombró en las palabras asociadas a este animal es el tema de la resurrección. Tras un largo periodo de sueño, de introspección y de inactividad, el oso emerge victorioso y va en busca de comida para proseguir en su camino.
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