Debido a su virilidad, al poder y su presencia, el toro ha sido un icono de culto para muchas culturas antiguas. Se ha considerado por algunas culturas como la mesopotámica, la griega, la romana o la egipcia como un animal sagrado y era común ofrecer la sangre de este animal como sacrificio en alguno de sus ritos.
En relación a la simbología celta, el toro representa la fuerza física y el poder. Dentro del esquema de pensamiento de los celtas, este animal era extremadamente viril y por ello simbolizaba fertilidad y el poder de procrear, lo que era sinónimo de extensión de vida. Los druidas asociaban al toro con la energía solar y a la vaca con la energía terrenal.
Además, el toro también ha sido símbolo de gran lujo y de riqueza y provisión por la cultura celta. De hecho el ganado ha sido siempre una fuente de beneficio y de aportes para los celtas durante siglos.
Siguiendo con la forma de pensar celta, se decía que el toro tenía una característica muy importante que destacaba sobre el resto y es que era muy cabezota y obstinado. Es también un símbolo de virilidad para los hombres y de fertilidad para las mujeres. Se dice, de acuerdo con los celtas, que ayuda a mejorar el estado mental en relación a la fuerza sexual.
Por todo esto, y por ser una gran fuente de comida para los celtas, es símbolo de tiempos fáciles y de abundancia en esta cultura.
En la actualidad, el toro tiene significados relacionados con la seguridad y la fuerza. Aunque no se conoce la fuente de la que proviene lo que a continuación vamos a decir, se dice que el toro es un símbolo positivo para la inversión en negocios, debido al estilo de este animal en su hábitat natural, un estilo activo y de ataque más que pasivo.
Otros simbolismos asociados con este animal son: estabilidad, virilidad, fuerza, provisión, seguridad, fertilidad, determinación y ayuda.
Algunos de vosotros sabréis, que hay una constelación que nos recuerda al toro y esto tiene un fuerte significado también. Esta constelación, Taurus, corresponde a la estación de la primavera y representa la abundancia y el significado de la primavera supone la renovación de la tierra.
Para los griegos, el toro era un atributo de Zeus (representado por la constelación Taurus) quien se transformo a sí mismo en un toro blanco. De acuerdo con esto, la simbología asociada a este animal gira en torno a definiciones como transformación, virilidad, fuerza y autorrealización.
Para los chinos, este animal un símbolo de especial relevancia y es que lo asocian con el calendario lunar y es símbolo de perseverancia, determinación, estabilidad y aguante. También es símbolo de trabajo duro y esfuerzo, materialismo, progreso metódico y determinación rígida.
De acuerdo con la astrología china, se corresponde con la estación de invierno y con las propiedades del yin (haciendo referencia al yin y el yang). El último año que fue el año del toro en el calendario chino fue el 2009 y el siguiente será el 2021. Para los sumerios por ejemplo, el toro era símbolo de protección y lo veían como un guardián. De hecho, el toro era un elemento central en el arte y en las estatuas de entradas a templos, como símbolo de protección de las puertas.
Desde la perspectiva hebrea, hay un símbolo con el que se identifica a este animal y de hecho este símbolo es la primera letra del abecedario hebrero y tiene una forma similar a la cabeza y cuernos de un toro. Este símbolo representa la habilidad de trabajar con la naturaleza y como sus criaturas nos traen abundancia y hacen que los humanos sobrevivan. Además, este símbolo, Aleph, es un símbolo de harmonía y provisión.
Por último, en la astrología, la gente de signo Tauro, de acuerdo con el zodiaco, son personas increíblemente fuerte tanto física como espiritualmente.
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