Es habitual que muchos hombres piensen que, después de casarse, ya no necesitan mostrar el mismo interés por las cosas de su mujer que cuando eran novios o cuando estaban comprometidos. Y ahí es donde se equivocan. Por supuesto, los errores no son, por definición, intencionales, pero cuando los hombres no pueden ni siquiera identificar y, en consecuencia, reconocer estos lapsos cotidianos, terminan siendo imprudentes en la relación, lo que, con el tiempo, puede generar muchos problemas en la pareja. Consulta nuestra lista de 5 errores comunes que los maridos acaban cometiendo en el matrimonio y, por supuesto, lo que pueden hacer para evitar cada uno de ellos:
1. No pensar en sus necesidades
Planeas una velada romántica con su mujer, pero esperas a que llegue la hora de salir del trabajo para comunicárselo. No lo hagas. Organiza los preparativos para los dos con antelación. Haz una reserva en su restaurante favorito y pide a la canguro que cuide a los niños.
2. No escucharla
No creas que sabes lo que va a decir tu mujer. No cuelgues el teléfono antes de que termine de hablar, simplemente porque ya lo has oído antes. Escucha atentamente lo que tiene que decir. En otras palabras, presta toda tu atención a su opinión y a sus comentarios o recomendaciones.
3. No entenderla
Como muchos hombres, intentas "arreglar" los problemas en lugar de comprender lo que siente tu mujer. A veces, lo único que quiere es que escuches lo que tiene que decir, no que le des consejos. En caso de duda, no seas tímido y pregunta: "¿Quieres mi consejo sobre esto o solo necesitas que te escuche?". Piénsalo.
4. No conocer sus gustos
¿Recuerdas cómo conociste a su esposa? ¿Cómo empezasteis a salir? ¿Cuándo fue la última vez que pasaste tiempo hablando de ella y no con ella? Pregúntale qué sueños tiene en la actualidad, cuáles son sus objetivos vitales, dónde le gustaría pasar las vacaciones, qué buen libro ha leído en los últimos días. Esto demostrará que te interesan sus cosas.
5. No confiar en ella
Tu mujer quiere estar presente en todos los aspectos de tu vida. Confía en ella. Los hombres no suelen hacerlo a menudo, pero cuando decides compartir tu vida con alguien, hablar con ella también forma parte del paquete. Así que habla de tus sueños, de tu trabajo, de tus objetivos y de tus planes. Con ello, el vínculo matrimonial solo puede verse reforzado.
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