4 cosas que nunca debes hacer en tu matrimonio

Manuel GarManuel G | 04 Septiembre 2023

El matrimonio es como un baile, que requiere el entrenamiento de la pareja y el trabajo en equipo. Y al igual que en un baile, es posible que de vez en cuando, al tratar de que los pasos se coordinen, la pareja llegue a pisarse. Son pequeños problemas que hay que ajustar para que todo vuelva a la normalidad.

20220706171714

Pero además de pisar los pies del otro, hay quien pisa el corazón, hiriendo a la persona que ama. Puede ser un acto intencionado, o tratarse simplemente de una actitud que proviene de la educación familiar, un hábito adquirido en la juventud y nunca abandonado, por ejemplo. Por lo tanto, si el otro no reconoce que hay un problema, puede empezar a crecer una raíz de amargura dentro del matrimonio.

A continuación vamos a enumerar algunas actitudes que pueden herir profundamente a tu pareja. Puede que a ti le parezcan absurdas, pero es posible que la persona que amas no piense de la misma manera. Y una de las principales tareas del matrimonio es proteger el corazón del otro.

Busca cómo solucionar los problemas de verdad

No se trata de una regla, pero por lo general, los hombres tienden a poner parches sobre los problemas para “solucionarlos” rápidamente. Y hay algunas mujeres que también se comportan de esta manera. El hecho es que, independientemente de que uno u otro adopte esta actitud, es fundamental hablar del problema que se quiere resolver. En primer lugar, por supuesto, uno de los dos debe adoptar la posición de oyente. Aunque ambos estén dispuestos a escuchar antes de discutir, uno de ellos iniciará el proceso. Y la pareja debe unirse para encontrar una solución al problema.

No hacer nunca planes sin consultar primero con el otro

Cada vez que te limitas a comunicar a tu pareja una decisión que has tomado, sin haberlo consultado con él o ella, estás siendo irrespetuoso. Sois una pareja y responsables de varias cosas juntos y es importante que os comuniquéis vuestras intenciones antes tomar alguna decisión. Hombres, no os sintáis menospreciados por responder a una invitación con algo así como "Me encantaría, pero primero voy a consultar con mi mujer, para ver si tenemos algún plan para ese día" y, mujeres, no os sintáis menos dueñas de vosotras mismas diciendo: "Hablaré con mi marido de ello y os llamaré más tarde".

No mires a otras personas

Estáis caminando juntos y otra persona atractiva se cruza en vuestro camino. Al instante giras tu cabeza para contemplarla. Es cierto, no has dicho una sola palabra, pero el efecto de tu acto ha sido igual de destructivo. Tu pareja no desea únicamente tu fidelidad física, sino también mental. Puede que haya sido algo inconsciente, pero si te fijas en otras personas, indica que aquella con la que te has casado ya no te interesa como antes. Esto interfiere en su autoestima, generando desconfianza y malos sentimientos, que minarán vuestra relación.

Nunca escondas a tu pareja

No pienses que separar tu matrimonio del resto de actividades que emprendes es una forma de proteger a tu pareja. En lugar de eso, estás dañando la relación. Actitudes como no llevar anillo de casado, no tener algo que te recuerde a tu familia en tu mesa de trabajo, no indicar que estás casado en las redes sociales o cualquier detalle que dé la impresión de que tu matrimonio no es una parte central de tu vida, son malas. Demuestra siempre que te sea posible lo orgulloso que estás de la persona con la que te has casado y habla de ello con entusiasmo a los demás. Además, no entres en conversaciones que ridiculicen la relación conyugal. En estos casos, demuestra que tu matrimonio va muy bien y que tu pareja, a pesar de todos los defectos, es alguien con quien merece la pena compartir la vida.

Escribe un comentario